viernes, 21 de septiembre de 2012
Casualidades o partes del destino
- No creo en las casualidades
- ¿Por qué no? Sería como creer en los cuentos de hadas
- Eso es distinto. Creo qeu hay una epoca para los cuentos de hadas y tal vez la nuestra haya pasado ya. Ademas los cuentos de hadas son bonitos precisamente porque son breves.
- ¿Qué quieres decir?
- Si tras el "vivieron felices y comieron perdices" la historia continuara, el final sería muy distinto
- Eres cínica
- Me defino mejor como realista
jueves, 20 de septiembre de 2012
Dominar el futuro
Saber lo que va a pasar.
Huir de las casualidades. Someter al destino. Me consuela pensar que todo esto
es más sencillo cuando controlas las pequeñas decisiones de cada día, cuando
las conviertes en una rutina. Pero si no podemos controlar nuestro futuro al
menos nos queda el consuelo de intentar predecirlo. Supongo que la cuestión es
sentirnos un poco más seguros, que alguien nos diga aunque sea desde unas
líneas impresas en papel reciclado que todo va a salir bien, que nuestros
proyectos van a cumplirse, que hoy puede ser un gran día, nuestro día de
suerte.
El futuro nunca deja de
zarandearnos con sorpresas inesperadas que nos rompen los esquemas y nos hacen
replantearnos todo lo que sabemos. Nunca deja de asombrarnos con nuevas
oportunidades para tomarle el pulso a nuestro espíritu de superación.
Nunca deja de poner a prueba nuestra capacidad de plantar batalla, de volver a
empezar una y otra vez desde la casilla de salida. Nunca deja de demostrarnos
que por mucho que intentemos controlarlo el futuro es impredecible.
Lo único que sabemos a ciencia cierta es que todos avanzamos a un
ritmo de sesenta minutos por hora, hagas lo que hagas, seas quien seas. Da
igual los errores que hayas cometido en el pasado o cuantas veces hayas pedido
perdón. Todos avanzamos por el mismo camino, y me consuela pensar que en este
viaje podemos dejar atrás los tropiezos, las culpas, las caídas. Que
mientras vamos tirando podemos trazar nuestra propia ruta y plantarle cara al
futuro. Es la única manera que se me ocurre de dominarlo.
miércoles, 19 de septiembre de 2012
Prisas
En ocasiones pensamos en nuestra
vida como si fuese la respuesta que tranquiliza a los demás. Tomamos decisiones
para complacerles, para calmar nuestros sentimientos de culpa, para buscar la
aprobación de algo o de alguien. Pero no nos damos cuenta de que la única forma
de felices a los demás es elegir lo mejor para nosotros.
Quizás lo hayan dicho muchas
veces, puede que incluso demasiadas, pero tu vida es tuya. Con tus sonrisas,
tus dolores, tus sueños, tus ilusiones, tus llantos y tus momentos felices.
Los sueños, tus ilusiones, tus
acciones… existen para poder intentar realizarlas, sin embargo, cada día nos
decimos “Sí, lo haré mañana”, pero,
¿y ahora?, ¿de qué vivimos ahora?
Y te das cuenta que lo
importante, como para todo, es no tener
prisa.
lunes, 17 de septiembre de 2012
Pído-te
Subo las escaleras, pero me
detengo. Meto la mano en el bolsillo. No busco nada en particular. Pero busco
todo, mi todo particular, y ese todo es un poco de suerte. Justo la que
necesito.
En la vida no resulta tan fácil
encontrar bolsitas de azúcar que la endulcen un poco.
sábado, 15 de septiembre de 2012
Escepticismo
Hay cosas que no se creen si no
son vistas, e incluso habiéndolas visto, resultan demasiado incoherentes.
A lo mejor viste como ayer se
derramaban ciertos recuerdos de mis ojos y mis pensamientos y decidiste
mandarla para consolarme o incluso puede que venir tu mismo. Papá me avisó de
que tenía visita.
Había cambiado el lugar de
encuentro que siempre era neutral y coincidente con mis únicos momentos de
desconexión con el mundo real y la tierra que piso. El lugar perfecto donde me
quedo a andar por las nubes y donde tu me acompañas en mis sueños o en mis
pensamientos inalcanzables. Ayer no. Ayer asomabas por una ventana que me da
luz a mi derecha en esa habitación sin un espacio cerrado que agobie y con la
suficiente altura para creerme que estoy en las nubes y que soy guerrera de mis
propios sueños. Supongo que tu ayer serias mi aliado, y ella el aliento que
presta un alma. Aunque no sepa cual es. Pero un alma sincera que nunca
abandona. Ni en los peores momentos o en los mas delicados. Una gran compañera.
¿Fuiste tu? ¿Fuiste tu el que
decidiste venir a verme?
Seas quien seas, sabido/a de mi
gran amor a ellas, gracias por reducirles su vuelo para incluso llegar a
fotografiarlas y demostrarme a mi misma que su existencia y compañía no es otro
sueño de verano mas, de cuando paseo por mis nubes infinitas.
viernes, 14 de septiembre de 2012
Allí donde estás tú
Y tú? Cómo estás?
No me he acercado a verte porque
de sobra sabes que no puedo y que tampoco se demasiado bien el motivo. Supongo
que será por el mismo por el cual me cuesta tanto entrar al salón a pesar de
tanto cambio.. Además no sabia que llevar a nuestro primer encuentro tras tantos
años de distancia obligatoria. No sabía como adornar esa cita más a ciegas que
ninguna otra. Una cita con la nada más personalizada y recreada en alguien.Tampoco me gusta el lugar, aunque
es silencioso estaríamos rodeados de demasiadas nadas y alguna que otra persona
acudiendo a cualquier otra cita; incluso pudiera haber alguna despedida y no,
no me gustan.
Supongo que un día tendre valor
para dar unos cuantos de pasos e ir a saludarte. Quizas, (y ambos lo sabemos)
cuando sea capaz de perdonarme no haberlos dado en su momento, y me asegure de que
no correrá ningún tipo de río por mis mejillas. No es ese el tipo de paisaje
que quiero mostrarte. Mientras tanto, sabes que te
pienso mucho mas de lo que tu pudieras incluso creer en su día. Mucho mas de lo
que hubieras podido esperar … a veces, como tu me dijiste, las cosas no son
como aparentan.
Cuídate mucho allí y estate
preparado con la mejor de las rallas al lado de un pelo que nunca se cayó,
porque tanto por aquí, como algún día por allí, no olvides que volveremos a
vernos.
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