Cuando era pequeña, siempre soñé con un príncipe que me despertase con un beso del sueño mas profundo, veinte años después me di cuenta de que los sueños se hacen realidad, un príncipe me despertó de un sueño profundo con tan solo una mirada.
Desde ese momento, me di cuenta que no quería otros besos que no fueran los suyos, que mi salvador no era un príncipe sino un héroe... Un héroe que viste combinando según conjuntos que recuerda, que no lleva zapatos sino botas, que se le pegan las sábanas cada mañana y que tiene los ojos hinchados por el cansancio del día a día.
Mi héroe me salvó de caer en el vacío mas profundo el mismo día que lo conocí. Bueno no, a los pocos días de conocerle. Me saca cada tarde del hastío de la rutina con una llamada, me quiere desde el primer momento en el que me conoció sin fiestas ni copas y se enamora incondicionalmente, a pesar de mis demonios, que son muchos. Esos demonios que intento enterrar y que a veces salen, imparables, en forma de ataques de ira o de tristeza y él, mi salvador, los espanta con un abrazo o un beso. Cuando ni yo misma me quiero, ni me soporto, mas me demuestra que estar´´a siempre a mi lado y me recuerda: "Tu medas las fuerzas", cuando me miro en el espejo y me veo horrible, con los ojos inundados de lagrimas, hinchados de llorar o de cansancio, él me dice, que "soy la mas bonita" y cuando no encuentro consuelo, me pide con ojos lagrimosos, "por favor, no llores mas".
Cuando creo que en mi corazón ya no cabe mas ponzoña, me lo recuerda: " eres la mejor persona que he conocido nunca" y me dice: "yo estaré siempre a tu lado".
Cuando soñaba con alguien que me amase así, nunca creí que pudiera ser posible ni muchísimo menos que pudiera ser para mi.
Mi mayor recompensa es tenerte a mi lado, así tal cual eres tu, que me digas que formaremos una familia, una vida en común. Entonces me doy cuenta que lo único que me hace feliz es verte feliz, que no me arrepiento ni un dolo día de mi vida de haberte conocido, elegirte y decidir que seas ese hombre, para el resto de mis días. Que sacrificaría muchas cosas por ti, a cambio de que fueras feliz siempre, sin condiciones.
Tu, que me has hecho mejor persona, me has enseñado lo que es el amor y a amar. Tu que ningún hombre se compara a ti, te prometo trabajar cada día para mejorar, para hacerte feliz y nunca separarme de ti, superar todos los obstáculos que nos depare el camino y nunca dejarte ir.