Pienso quedarme en cada uno de tus pasos, en todo el camino, vayas donde vayas, incluso si es la mayor locura que se te haya podido pasar por la cabeza. A mí siempre me dijeron que estaba un poco loca.
Me quedo.
Y si te caes, me tiro contigo y luego nos levantamos de un salto a comernos el mundo de nuevo o un plato de andrajos (o dos). Porque ahí parado, las vistas pueden ser buenas, pero desde lo mas alto ni te cuento. Y te empujo hacia delante todas las veces que haga falta hasta que se te quite de la cabeza mirar atras.
Y aunque cuando ni si quiera tú estés, me quedo. Para estar contigo. Y para ser, que es lo que importa. Porque me quedo con cada uno de tus pasos, con cada escalon que das hacia arriba para ser quien quieres ser y no quien quieren que seas. Me quedo en cada lágrima, para quitartelas con una sonrisa o dos si son pequeñas. Me quedo en cada miedo, en cada inseguiridad y en cada "y si...", porque los abrazos siempre lo curan todo.
Me quedo